Cuatro talleres de fomento del consumo local, con base en la preparación de alimentos, utilizando los cuatro productos cadena de PRIICA se han efectuado en: Candelaria, Cuscatlán; Tacuba, Ahuachapán; Jiquilisco, Usulután y San Ignacio, Chalatenango.
Cuatro talleres de fomento del consumo local, con base en la preparación de alimentos, utilizando los cuatro productos cadena de PRIICA se han efectuado en: Candelaria, Cuscatlán; Tacuba, Ahuachapán; Jiquilisco, Usulután y San Ignacio, Chalatenango.
La dinámica parece sencilla, pero está transformando la vida diaria de los inscritos en el Programa, sus familias y vecinos. Una chef, acompañada por los gestores técnicos de PRIICA, visita las comunidades y elabora, con ellos, recetas alternativas que como ingredientes priorizan: papa, yuca, aguacate o tomate, sumando, en algunos casos, ingredientes locales.
Además de una clase de cocina, la práctica es un aprendizaje sobre la nutrición y los beneficios de cultivar y consumir los productos cadena. La versatilidad de las recetas es amplia, es decir son platillos que pueden replicarse para una lonchera saludable, bocadillos o antojitos nutritivos, platos básicos para los tres tiempos de comida y, además, útiles en celebraciones o reuniones comunitarias, familiares y sociales.
También, los platillos son económicos, ligados a costumbres locales, con ingredientes complementarios fáciles de adquirir y altamente prácticos.
Los talleres culinarios han favorecido a 78 beneficiarios de los cuatro productos cadena, principalmente, 52 mujeres. Con esta iniciativa se fomenta la seguridad alimentaria, uno de los enfoques fundamentales.
La aceptación y retroalimentación de las capacitaciones es elevada; los cambios son evidentes. Por ejemplo, en el municipio de San Ignacio, al norte de El Salvador, los productores de papa no recolectaban los tubérculos muy pequeños o miniatura, pues creían que carecían de todo valor, y se generaba un desperdicio; mediante el aprendizaje culinario han descubierto un sabor nuevo, un plato innovador para su dieta y la existencia de un producto agrícola que puede comercializarse como en los supermercados de la capital. La idea estuvo ligada a la capacitación en innovación comercial que recibieron en los módulos y potenciada mediante esta experiencia complementaria.