Mujeres rurales de los municipios: Cacaopera y Jiqulisco, oriente de El Salvador, han sido las principales protagonistas técnicas al dirigir grupos que depositaron una gota en el ojo de numerosas aves de corral, como parte de una campaña de vacunación avícola.
Luego de ser capacitadas en Escuelas de Campo, las brigadas lideradas por ocho mujeres, en cada uno de los lugares, llevaron a cabo la aplicación de vacunas, como parte de las acciones del Proyecto Asociatividad, Resiliencia y Mercados.
Mujeres rurales de los municipios: Cacaopera y Jiqulisco, oriente de El Salvador, han sido las principales protagonistas técnicas al dirigir grupos que depositaron una gota en el ojo de numerosas aves de corral, como parte de una campaña de vacunación avícola.
Luego de ser capacitadas en Escuelas de Campo, las brigadas lideradas por ocho mujeres, en cada uno de los lugares, llevaron a cabo la aplicación de vacunas, como parte de las acciones del Proyecto Asociatividad, Resiliencia y Mercados.
En el municipio de Jiquilisco, 78 familias beneficiadas atendidas con esta actividad y como resultado: 1300 aves fueron vacunadas en las Comunidades 14 de julio y El Carmen. Este día, se totalizarán los datos de la jornada en Cacaopera.
La campaña genera condiciones zoosanitarias óptimas, previo a la entrega de nuevos módulos avícolas; ya que evitará posibles infecciones de las enfermedades, Newcastle y bronquitis, entre animales existentes y nuevos.
La introducción de especies menores es una acción financiada por la Cooperación Italiana en el marco del Proyecto para fomentar diversificación, seguridad alimentaria y resiliencia.
