En 1991, la Unión Europea (UE) se convirtió en Observador Permanente del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA). Era el momento en que las instituciones europeas iniciaban una década hacia una Europa sin fronteras.
Desde entonces y hasta la actualidad, las relaciones entre el IICA y la UE se fueron fortaleciendo a través de pequeñas iniciativas a nivel país y luego mediante estrategias regionales.
En 1991, la Unión Europea (UE) se convirtió en Observador Permanente del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA). Era el momento en que las instituciones europeas iniciaban una década hacia una Europa sin fronteras.
Desde entonces y hasta la actualidad, las relaciones entre el IICA y la UE se fueron fortaleciendo a través de pequeñas iniciativas a nivel país y luego mediante estrategias regionales.
En el Día de Europa, el Director General del IICA, Manuel Otero, agradeció los esfuerzos de las Instituciones europeas que, desde Bruselas, las Embajadas o las Representaciones Permanentes “han consolidado una relación fructífera entre Europa y las Américas”.
Durante más de 20 años, el IICA y la UE han unido esfuerzos para fomentar el desarrollo agrícola y el bienestar rural por medio de cooperación técnica. Otero comentó que en la actualidad ambos están preocupados por desafío globales como el Cambio Climático o la preservación del Medio Ambiente. Pero, que también están interesados en cuidar de las personas, los alimentos, el suelo, el agua, la capacitación, el comercio, las TICs o la investigación. “Afrontamos retos comunes y compartimos estrategias”, puntualizó.
Haciendo un repaso del camino recorrido juntos, el Director General reconoció que, gracias al apoyo de la UE, el IICA ha desarrollado 29 proyectos de diversas temáticas: agricultura familiar, cambio climático, sequía, café, bosques, turismo, apicultura, comercio, azúcar, investigación e innovación.
En total, se han beneficiado 26 países de la región mediante acciones conjuntas en pro del desarrollo sostenible y la inclusión social. Esto ha permitido mejorar la vida de cientos de miles de personas.
“Desde aquí, reafirmamos nuestro compromiso por seguir trabajando conjuntamente y para que durante la próxima década podamos avanzar juntos hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”, concluyó Otero.
