Junto con el Ministerio de Ambiente, capacitan a funcionarios de los sectores de agricultura, transporte y manejo de residuos para desarrollar una NAMA, conjunto de acciones que contribuyen a reducir emisiones y que pueden recibir financiamiento para su implementación.
San José, Costa Rica, 21 de noviembre, 2012 (IICA). Mediante la asesoría y capacitación para acceder a recursos financieros, y el vínculo con posibles socios de otras partes del mundo, el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y la Agencia Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ) apoyan los esfuerzos del sector cafetalero costarricense para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a la atmósfera.
Este sector, con el impulso del Ministerio del Ambiente, Energía y Telecomunicaciones (MINAET), el IICA y GIZ, está formulando una Acción de Mitigación Nacionalmente Apropiada (NAMA, por sus siglas en inglés) para aumentar su eficiencia productiva, utilizar de manera sostenible los recursos naturales y reducir sus emanaciones de GEI.
La NAMA, un instrumento de financiación para proyectos de sustentabilidad surgido en el seno de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC), podría estar diseñada antes de finalizar el 2012 y en fase de implementación hacia mediados del próximo año, explicó Andreas Nieters, representante de GIZ en Costa Rica.
“En la próxima Conferencia de la Partes de la Convención Marco, o COP18, se mostrará el trabajo realizado hasta el momento como una iniciativa innovadora y ejemplarizante llevada a cabo por este país”, comentó David Williams, gerente del Programa de Agricultura, Recursos Naturales y Cambio Climático del IICA.
La COP18 se efectuará en Doha, Catar, del 26 de noviembre al 7 de diciembre de este año.
Así como lo hace el café, en Costa Rica también se procura elaborar una estrategia de reducción de emisiones en el ramo de transporte público y en el de manejo de residuos sólidos, por lo que IICA, GIZ y MINAET organizaron recientemente un taller de capacitación para representantes de los tres sectores, acerca de los pasos necesarios para estructurar una NAMA y conseguir financiamiento a través de ella.
Con esos pasos, se procura cumplir con los requisitos establecidos por la UNFCCC.
De acuerdo con Williams, el sector cafetalero costarricense se ha esforzado en los últimos años por mitigar su impacto ambiental, una experiencia que podría ser trasladada a otras actividades agrícolas con el apoyo del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y el Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE).
“Costa Rica es un país muy proactivo, mediante las NAMA tendrá oportunidad de acceder a recursos financieros para reducir sus emisiones de GEI, pero esto también la obliga a estructurar una propuesta que, más allá de la mitigación, permita avanzar en la adaptación al cambio climático”, añadió Nieters.
En la capacitación, efectuada en octubre en la sede central del IICA, participaron unos 40 representantes públicos y privados de los sectores cafetalero, de transporte público y de manejo de residuos, quienes asumieron el compromiso de elaborar la NAMA en el corto plazo.
El representante de GIZ expresó que además de Costa Rica, apoyan el desarrollo de estrategias de mitigación en sectores productivos de México, Brasil, Colombia y Chile.
Más información:
david.williams@iica.int