Jóvenes triunfan con la comercialización hortícola
La Paz, 30 de agosto del 2021 (IICA). Las nubes se mueven bajas y rápidas en esta mañana fría en la comunidad El Pelón, municipio de Marcala, La Paz, una zona conocida por producir uno de los mejores cafés de todo Honduras.
Sin embargo, 15 jóvenes que nos esperan se dedican a un rubro diferente desde que los precios del grano empezaron a caer y la crisis de la roya hizo del cultivo de café, una lucha que cada vez menos personas se atreven a enfrentar.
La discreta, pero risueña conversación de Joel, Samuel y Fabian revela un vínculo que supera la relación productiva que tienen gracias al grupo de productores “Jóvenes Unidos al Desarrollo”, donde junto a otras 12 jóvenes de la comunidad, hacen frente a los retos de la producción agrícola en la zona.
El grupo de jóvenes tiene experiencia en el cultivo de al menos diez tipos de hortalizas distintas, sin embargo, la siembra desprotegida, los efectos del cambio climático y los precios variables del mercado no les han permitido consolidarse en ninguno de ellos.
“El precio variaba. Nosotros vendíamos más aquí en el mercado local, entonces no ganábamos casi nada, obteníamos casi lo mismo invertido en el capital”, recuerda Joel González.
Fue a principio del 2020 que los técnicos de la Red Comercialización Comunitaria Alternativa (Red COMAL), se acercaron al grupo de Jóvenes Unidos al Desarrollo, en la comunidad El Pelón, municipio de Marcala, departamento de La Paz y los invitaron a formar parte del proyecto: “Gestión del Conocimiento para la Adaptación de la Agricultura Familiar al Cambio Climático (INNOVA-AF)” implementado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura IICA, con financiamiento de Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola FIDA.
Uno de los componentes de este proyecto ha sido la transferencia de conocimientos para la implementación de prácticas y tecnologías agroecológicas, entre ellas: elaboración y uso de bioinsumos a partir de materiales orgánicos de la misma finca, la construcción y mantenimiento de tanques de ferrocemento, filtro de reutilización de aguas grises y la instalación de sistemas de micro riego por goteo para el cultivo de vegetales como el chile morrón, el tomate y lechuga, que tienen un potencial comercial mayor, tanto en la zona como en mercados más grandes a nivel nacional.
Agroecología
Pero las prácticas y tecnologías agroecológicas son solo una parte de la iniciativa, otro componente importante tiene que ver con el acceso a un mercado seguro para los productos que se cultivan dentro de las parcelas productivas.
Actualmente el 90% de la producción de tres variedades de lechuga, se comercializa en “Supermercado La Antorcha”, es uno de los distribuidores de vegetales más importantes del país. Para la Red COMAL, el reto no solo es generar una cadena comercial formal, sino también lograr precios justos y previamente establecidos, para mejorar su producción en cantidad, frecuencia y calidad, además de otorgarles la seguridad de un mercado que, a diferencia del café, es más estable y tiene mayor potencial crecimiento.
“Para meternos a un producto de estos, nosotros tenemos que tener primero el mercado. En el mercado del pueblo hay tanto ‘coyote’ (intermediario) que a Lempira quieren pagarnos cada lechuga. Entonces de ahí nuestra idea de entrar en este proyecto, porque sabíamos que teníamos un mercado seguro.”, manifestó Samuel González.
Por su parte Fabián, asegura “Ahora nosotros somos más independientes, tenemos nuevos conocimientos, mayores ingresos económicos y generamos empleo para otros jóvenes. Estos proyectos son muy importantes, abren oportunidades a la juventud rural y contribuyen a satisfacer muchas necesidades y no pensar más en irnos de la comunidad.” Agradecemos a la Red COMAL.
INNOVA AF es financiado por el FIDA y ejecutado por el IICA, el proyecto busca fortalecer las capacidades de familias campesinas, integrantes de sistemas territoriales de agricultura familiar (STAF), con baja resiliencia actual ante los impactos del cambio climático, en territorios semi-áridos y sistemas de montaña para participar activamente en procesos de transformación rural en ALC implementando buenas prácticas de territorios con condiciones biofísicas y socioeconómicas similares.
Más información: marco.fortin@iica.int